La vacunación es uno de los aspectos más importantes del cuidado de nuestras mascotas; sobre todo si se trata de perros o felinos. Muchas de ellas son obligatorias y recomienda que se coloquen en los primeros meses de vida, para así evitar que nuestra querida mascota contraiga una enfermedad mortal. Las vacunas necesarias cambian en función de si se trata de un perro o un gato, además de su etapa de la vida.

No importa la edad de tu perro, colocarle sus vacunas es importante. ¿La razón? Estas se crearon específicamente para enfermedades que suelen ocasionar la muerte y que se pueden transmitir de manera bastante sencilla. Incluso, algunos de estos padecimientos también pueden afectar a los humanos. Si aún no sabes cuáles son las vacunas o para qué sirve cada una, aquí te explicamos en detalle ¡También podemos ayudarte en el proceso de vacunación de tu mascota!

Tipos de vacunas para perro y contra qué protegen

Por lo general, las vacunas para perro se suelen colocar en una sola dosis que contiene inmunización para varias enfermedades específicas. En la actualidad existen tres tipos de vacunas: la trivalente, tetravalente y polivalente. La primera suele ofrecer protección contra el moquillo canino, la hepatitis infecciosa canina y la leptospirosis.

La vacuna tetravalente, además de ofrecer las mismas protecciones que la trivalente, también protege contra el virus mortal de la parvovirosis canina. Por última está la vacuna polivalente; que es la más completa y la que se suele recomendar para todos los perros.

Como hemos mencionado, suele variar dependiendo de la marca y el proveedor, pero la más básica suele contener las protecciones anteriores; con el adicional de la tos de las perreras y el más reciente coronavirus canino.

¿Cuándo se deben vacunar a los perros?

Desde cachorros, los perros ya deben estar recibiendo sus vacunas. En la actualidad, existen un calendario oficial en el que se establece cada cuando tiempo se le deben colocar las vacunas a nuestros amigos peludos. Este calendario es obligatorio para todos los perros, aunque puede cambiar ligeramente entre algunas comunidades autónomas.

La primera vacuna que se exige es la primovacunación, que se debe colocar a las 6 semanas de vida. Esta, en realidad, consiste de varias vacunas. La vacuna de parvovirosis, del moquillo canino y dos polivalentes. Después, a las 8 semanas, solo es necesario la vacuna polivalente.

Cuando el cachorro alcanza las 12 semanas de vida, se hace un refuerzo de la vacuna polivalente. A las 16 semanas se requiere la vacuna contra la rabia. Una vez se ha cumplido este calendario, ya sea en cachorros o adultos, solo es necesario hacer refuerzos anuales; si es posible, de por vida. En esta frecuencia solo se requieren recordatorios de la vacuna polivalente y de la rabia. Por otro lado, algunas comunidades solo exigen cada dos años.

Vacunas para perros adicionales

Las vacunas que mencionamos anteriormente son las principales y obligatorias para un perro. Sin embargo, existen también parias vacunas no esenciales que a veces nuestro veterinario puede recomendar. Seguro te preguntarás ¿Si no son necesarias, por qué ponerlas a nuestra mascota? Se debe a que cada perro, dependiendo de su estilo de vida, se ve expuesto a peligros diferentes.

Por ejemplo, si un perro pasa mucho al aire libre, asiste a guardería para perros de manera frecuente o viaja con frecuencia, se ve expuesto a una mayor variedad de enfermedades. Es por eso que algunos veterinarios recomiendan vacunas contra Bordetella bronchiseptica, Borrelia burgdorferi y bacterias leptospira. También se puede aplicar una vacuna contra la Leishmaniasis, una enfermedad mortal y cuyo tratamiento no suele ser efectivo.

¿Qué hacer si mi perro aún no tiene sus vacunas?

Un perro sin vacunas es un perro expuesto. Lo ideal es que le coloques las vacunas requeridas lo más rápido posible. Sin embargo, si aún es muy cachorro y debes esperar; o no puedes acudir al veterinario pronto, lo ideal es brindar cuidados de prevención especiales. Es decir, trabajar en fortalecer su sistema inmunológico y evitar que se exponga al aire libre por un tiempo. Asimismo, evitar la socialización con otros perros será esencial para evitar que contraiga una enfermedad.

Asimismo, recuerda acudir de forma periódica con tu veterinario para comprobar el estado de las vacunas. Esto se hace con una prueba de titularidad. Algunos veterinarios la recomiendan para saber cuántos anticuerpos quedan de una vacuna y si será necesario un refuerzo pronto, o se puede esperar un poco más de tiempo. Recuerda ¡Son importantes para la salud!