Si hay algo en lo que coincidimos todos los humanos es en que a ninguno le gusta ir al médico. A pesar de ello, son muchas las razones que ameritan que los visitemos de vez en cuando; y estas no necesariamente tengan que ver con síntomas de malestar. Podemos ir a consulta por el simple hecho por exámenes rutinarios en el trabajo o para sospechas de un embarazo. Una lógica similar debemos aplicar con nuestra mascota.

Se trate de un perro, un gato o de cualquier otra especie, la opinión de un veterinario respecto a su salud siempre será necesaria. Pero no debemos dejarla únicamente para momentos de enfermedad; en cambio, lo mejor es pisar adelante y llevar a nuestra mascota a chequeo médico cada cierto tiempo, según las recomendaciones de expertos. El porqué lo explicamos a continuación.

Control de peso para prevenir enfermedades

A efectos visuales, los animales subidos de peso resultan encantadores para casi todo el mundo. Y aunque esto también es una señal de una vida muy cómoda y buena alimentación, al ir al veterinario probablemente cambiemos de opinión. Y es que el sobrepeso no es bueno bajo ningún contexto. Al contrario, puede ser una bomba de tiempo para nuestra mascota.

Existen una infinidad de enfermedades asociadas con el sobrepeso y, mayoritariamente, con la obesidad. Los animales no están exentos de ellas, por lo que mantener su peso controlado es uno de los pasos más primordiales para favorecer su salud. Y, claro está, la mejor forma de saber si vamos o no por buen camino es ir al veterinario.

Chequeo médico para diagnósticos o descartes tempranos

A veces nuestra mascota luce muy bien a simple vista, pero internamente pasan cosas que podrían generar dificultades más adelante. Un chequeo médico adecuado cada cierto tiempo podría ayudar a detectar a tiempo cualquier anomalía. Esto, a su vez, conduciría a un tratamiento temprano que la mayoría de las veces se traduce en una recuperación completa y pronta.

Por el contrario, dejar de ir al veterinario según lo recomendado para cada especie puede ser perjudicial. Las enfermedades podrían progresar de manera silenciosa y llegar a un punto en que resulte mortal para la mascota. Muchos cuidadores desestiman la importancia del chequeo médico, pero la evidencia sugiere que actuar a tiempo arroja mejores resultados.

Asimismo, ir al veterinario con regularidad puede ayudar a los cuidadores a estar más tranquilos respecto a la salud de sus mascotas. Y es que, pese a todos los cuidados y mimos que les demos en casa, algunas son más frágiles que otras; esto puede ser por condiciones genéticas, de nacimiento o por lesiones durante su vida. En estos casos, el chequeo médico no puede omitirse por ningún motivo.

Esterilización

A pesar de las numerosas campañas y de los consejos de los especialistas en veterinaria, la esterilización de una mascota sigue siendo un tema complejo. Algunos cuidadores prefieren no proceder con ella para permitir que su gato o perro engendre crías que también pasen a formar parte de la familia. Esto es completamente válido, pero se superpone a un problema antiguo de sobrepoblación.

Actualmente, se recomienda la esterilización para estimular la adopción de animales rescatados o en situación de calle. Esto no solo las ayudaría a integrarse en una familia y obtener una mejor calidad de vida; también contribuiría con la solución de problemas culturales y sanitarios derivados. Al ir al veterinario, los cuidadores pueden recibir la asesoría necesaria para decidir si es prudente o no esterilizar a su mascota.

Vacunación a tiempo

Por último, está la vacunación, otro de los temas que genera polémica a pesar de la antigüedad de este procedimiento. Así como en los humanos, en lo que respecta a las mascotas, lo mejor es la prevención. Las vacunas forman parte de esta estrategia que evita infecciones muy difíciles de tratar y que además puede salvar vidas animales. La vacunación es un escudo indispensable para su mascota.

Ir al veterinario con regularidad, y especialmente desde que los primeros meses de vida de la mascota, puede ayudar en ello. Un cachorro con sus vacunas al día no solo tiene más probabilidades de vivir; también puede proteger de manera indirecta a otros cachorros e incluso a los habitantes humanos de su hogar. He allí la importancia del chequeo médico desde temprana edad.